Colombia en pocos años ha incursionado con fuerza en el negocio del cacao, debido a que existe una permanente capacitación al agricultor en la postcosecha y en la elaboración del chocolate; lo que genera suficiente rentabilidad para desplazar las plantaciones de coca. Además, los agricultores chicos y grandes están muy bien organizados en la poderosa Federación Nacional de Cacaoteros FEDECACAO, que asesora, capacita y dispone de fondos para ello, tanto propios, como donados por el gobierno norteamericano, que así contribuye a debilitar a las guerrillas, al quitarle el espacio para los sembríos ilegales.
En cambio, al agricultor ecuatoriano, solo se le capacita en la postcosecha a los que tienen cantidades importantes de sembríos, a la mayoría de los pequeños nadie les toma en cuenta, como no sea para pagarles miserias por el cacao en baba, que es el gran negocio de los intermediarios, que actualmente ni siquiera fermentan la pepa, simplemente la lavan y la secan, por lo que sabores y olores no se crean y ello poco a poco va mermando la fama del cacao ecuatoriano.
Colombia y Perú ya nos superan en producción de chocolate
Tampoco existe una organización de cacao cultores a nivel nacional, los únicos organizados son los exportadores que difícilmente llegan a relacionarse con los campesinos y dependen de una red de intermediarios sin control, sin capacitación y sin escrúpulos.
Mientras aquí seguimos ufanándonos que tenemos el mejor cacao del mundo, deteriorando su calidad y olvidando al campesino; el Salón del Chocolate de Lima, es 50 veces más grande que el salón del chocolate que se organiza anualmente en Cumbayá. Y el Chocoshow de Bogotá es el doble que el de Lima, pero esta feria tiene infinidad de actividades, concursos, pero especialmente un ciclo de conferencias con los mejores expertos colombianos en cacao y chocolate. Importante: en ambas ferias las marcas de chocolates mayoritarias, pertenecen a sus respectivas regiones amazónicas.
En pocos años Colombia nos va a superar en sembríos y ya nos supera ampliamente en marcas de chocolates que ya están en Estados Unidos y Europa. Perú también está muy por encima de nosotros en marcas de chocolate vendiéndose en el extranjero, de hecho, su Salón del Chocolate pertenece a la misma franquicia del de París, que es tal vez el más importante del planeta.