Texto y contexto crítico

Texto y contexto crítico es un espacio de ideas libres sobre la política nacional. Otros artículos del autor: http://bit.ly/jImbaquingo

Jorge Imbaquingo

Jorge R. Imbaquingo

Licenciado en Comunicación Social por la Universidad Central. Knight Fellow Stanford University 2012. Es periodista desde hace 23 años. Colabora con el Grupo EL COMERCIO desde el 2016 como Editor de Ciudad. Actualmente ocupa el cargo de Editor Político.

Ideas

Hoy, este Diario finaliza una serie de entrevistas con los 15 candidatos presidenciales que están confirmados para participar en las elecciones del 7 de febrero, más el postulante de Unes que está esperando que se resuelva la última impugnación que pasó del Tribunal Contencioso Electoral (TCE) al Consejo Nacional Electoral (CNE). Como balance general, cabe decir que ha sido un espacio en el que han primado las ideas.

Está visto que es una norma que, en campaña electoral, los candidatos tomen tres elementos que los posicionen: encuestas, propuestas de efecto mediático y (el que nunca falla) el insulto al rival.

Este medio de comunicación apostó por salir de esa lógica de marketing político. Apostó por las ideas, por dar libertad a los candidatos para que dejen esa confrontación mezquina que se visibiliza cada cuatro años, que no vean al resto de postulantes como adversarios y que simplemente digan qué harán en los primeros 100 días de su administración, en su primer año de gestión y cómo avanzarían en cuestión de gobernabilidad para finalizar su período.

Así, se impusieron las ideas en estas 16 entrevistas. Aun así, también eso implicó que muchos ofrecieran cosas poco probables, lo cual es un mal menor que los ciudadanos suelen reconocer sin problemas.

Algo cabe señalar. Se repite la historia de las elecciones para la Alcaldía de Quito del 2019, en las que este medio tuvo ese mismo enfoque: hay un cúmulo de ideas-estanco, como seguridad y empleo. Ahora, para las presidenciales, son las siguientes: la consulta popular como método de gobernabilidad, la revisión de los acuerdos con el FMI (y dependiendo de qué tan a la izquierda se habla de moratoria), la optimización del Estado para balancear las finanzas, bajar las tasas de interés para fomentar el agro y los emprendimientos, traer a la banca internacional y la lucha contra la corrupción. Parece que se copian las propuestas.

El periodismo muestra la realidad. Los ciudadanos la transforman.