En la última consulta popular y referéndum de 2024, los electores mostraron un mayor desinterés en acudir a votar. El Consejo Nacional Electoral (CNE) indicó el 21 de abril de 2024 que el 72% de las personas empadronadas acudió a votar.
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El ausentismo electoral en esta consulta popular fue de un 28%, según declaraciones de Diana Atamaint, presidenta del CNE, el 21 de abril. De igual forma, el vicepresidente del CNE, Enrique Pita, se refirió a este tema.
“Organizar un proceso en 60 días es definitivamente un proceso desafiante, pero creo que lo estamos cumpliendo con satisfacción”, explica Pita.
Añadió que el estado invernal no permitió que todas las juntas se instalaran; faltaron en dos recintos electorales de Manabí. “Eso definitivamente se declara nulo; son aproximadamente 340 electores. No afectarán el resultado en lo más mínimo”.
Históricamente, en Ecuador ha rondado entre el 18 y 20% de ausentismo en los procesos electorales. Esta problemática no es nueva en el país; en años anteriores también se evidenció la falta de interés en ir a votar.
En las elecciones presidenciales de 1998, el ausentismo en la primera vuelta electoral fue del 35,83%. Fue uno de los más altos de la historia, según la Organización de Estados Americanos (OEA). El nivel más alto de ausentismo se registró en la provincia de Morona Santiago, donde alcanzó el 45%.
La última referencia sobre una consulta popular fue sobre la extracción del petróleo del Yasuní. El ausentismo fue del 20%, ocho puntos menos que el actual.
Causas del ausentismo electoral
Santiago Cahuasquí, analista político, explica sobre la precariedad con la que se organizó el proceso para informar sobre el contenido de la consulta a la gente. Según el experto, el Consejo Nacional Electoral no pudo priorizar el debate sobre el contenido de las preguntas.
El analista menciona que esto podría deberse a un proceso de migración. Afirma que actualmente se vive la segunda gran migración hacia el exterior. “Solamente en 2023 se calcula que 700 000 ecuatorianos migraron hacia el extranjero. Muchos de ellos a Estados Unidos y Europa“, explica Cahuasquí.
Rodrigo Jordán, director del Centro Latinoamericano de Manejo de Crisis Política, señala algunos factores para comprender el ausentismo electoral. “Si observamos la historia, los índices de mayor ausentismo han coincidido con periodos en los que el hartazgo de la gente hacia la clase política ha sido alto. Por ejemplo, en 1998 y también en el 2002“, explicó Jordán.
Ambos expertos concuerdan en que la migración posiblemente sea otro factor que contribuye al aumento del ausentismo en la consulta popular y referéndum de este año.
Según el analista, el votante ecuatoriano está cansado de acudir a las urnas para ejercer un voto que quizás no tenga mucho impacto inmediato en sus condiciones de vida. Los especialistas coinciden en que los ecuatorianos han participado en tres consultas en los últimos gobiernos y los indicadores socioeconómicos no han mejorado.
Para Jordán, otra de las causas del aumento del ausentismo electoral es que, debido a la recurrencia de las elecciones, los documentos tienen poca vigencia. El experto hace referencia a que el próximo año habrá nuevas elecciones y muchos electores prefieren obtener su papeleta en ese proceso electoral.
Cahuasquí y Jordán también señalan que el mal temporal que se vivió el 21 de abril contribuyó al aumento del ausentismo electoral, ya que varias provincias fueron afectadas por las lluvias y, en algunos casos, no pudieron instalar las mesas de votación.
¿Qué se debe hacer para reducir el ausentismo electoral?
Para el próximo 9 de febrero de 2025, fecha de las elecciones presidenciales en Ecuador, se espera que más del 80% de los electores acudan a sufragar. Uno de los principales retos de las autoridades es reducir el porcentaje de ausentismo respecto a la última consulta popular.
“Me parece que para la elección presidencial volveremos al ausentismo promedio del 18%, dado que la gente ya percibe que este es un proceso mucho más importante”, dijo Jordán.
Cahuasquí indica que para evitar este ausentismo es necesario asegurar al elector condiciones apropiadas para que asista a las urnas, y también procurar que el elector migrante tenga las garantías para ejercer el voto. Asimismo, menciona que debe existir una política exterior más activa.
Los dos analistas coinciden en que la información debe presentarse de una manera más efectiva. En este sentido, señalan que las propuestas deben estar mejor articuladas para que las personas puedan conocer con mayor detalle tanto a los candidatos como a las propuestas.